Al teléfono

-¿Si?. No te creo!

- Enserio. Incluso me parece increíble a mí...
No hace mucho, pensé decirle a mis padres que estaba preparada para irme de casa.

Que ya lo había encontrado. Que tenia conmigo a la persona con la que me gustaría levantarme todas las mañanas, ponerme sus camisas blancas e ir a hacer el desayuno, esperar a que él me lo trajera a la cama.
A la persona con la que pelearme por el mando de la tele, para buscar que és lo mejor que estan dando por la noche.

A la persona con la que inventar discusiones absurdas con tal de luego tener una bonita reconciliación.
Sí. Estaba segura de todo eso y de más. Estaba preparada para dar amor y recibirlo, para cuidar y para que me cuidasen. Para tener en mi vida, dos protagonistas...

- Y qué pasó?

- Nada. No llegó a pasar.

Todo cambia

Y el silencio que se apoderó de tan magnifico momento fue preferible al terrible silencio que se podría haber producido..

Te ví, me viste y miraste de arriba abajo, pero ahora soy yo la que no tiene nada que decirte, ni susurrarte tampoco al oído, todo lo que sentía con tenerte a mi lado.
Te veía lejos y salía corriendo hacia ti, a abrazarte, a sentirte, me sentía bien contigo, lo recuerdo, segura de tu cariño, sintiendo tu respiración… Pero ahora… Es increíble como todo puede cambiar en un segundo (o dos).
Me molesté en enterrar los recuerdos y a ti con ellos, abajo en un cajón de ropa vieja, dónde nunca nada voy a buscar. Ya es tarde, no intentes volver…
Pero hoy, por alguna extraña e incomprensible razón, hoy volví a pensar en ti, y no m asusto. Pues se que no se volverá a repetir.

Corazón Coraza

Porque te tengo y no,

porque te pienso.

Porque la noche está de ojos abiertos.

Porque la noche pasa y digo amor,

porque has venido a recoger tu imagen

y eres mejor que todas tus imágenes.

Porque eres linda desde el pie hasta el alma,

porque eres buena desde el alma a mí.

Porque te escondes dulce en el orgullo ,

pequeña y dulce,

corazón coraza .

La espera

Cuando más rápido quieres que pasen las horas, más lentas las marca el reloj...
¿Nunca os ha pasado?. A mí, SÍ.
Ayer viví las 8 horas y media más lentas y angustiosas de mi vida.Una mezcla de estados y sentimientos se apoderaban de cada centímetro de mi cuerpo. Inquietud, sueño, nervios, espectación, más nervios... Y fe, que no se ni de donde me salió tanta.

Y por fin, a las 4, llegó tan esperado momento. Nos dijeron que te volvíamos a tener con nosotros. Y fué imposible no llorar, sobretodo al verte.

Yo ya no se ni a quién o a qué darle las gracias. Si al día de ayer que fué San Buenaventura, a los muchos ánimos y fuerzas que te ha mandado tanta gente, a las muchas cosas pendientes que aún te quedan por hacer o a la tanta falta que nos haces...

Te admiro. Y por encima de todo, TE QUIERO.

Gracias por seguir con nosotras.